Ya no hay religión que mande al infierno. Lástima.
Podríamos haber condenado al séptimo círculo al criminal que dijo que Los detectives (salvajes) es la novela que a Borges le hubiera gustado escribir. ¿A quién se le ocurrió que Los detectives salvajes era la novela que le hubiera gustado escribir a Borges? ¿A Echavarría (Ignacio) o a Fresán (Rodrigo)? ¡Cuánta ignorancia queda en el mundo, por Dios! ¡Reabramos el Gulag y reeduquemos a esta plebe intelectual, canalla y soez!
La novela que le hubiera gustado escribir a Borges se llama Seraphita, de Balzac.
Una novela imposible.
La historia de la mujer más bella de la tierra jamás contada.
Es tan bella Seraphita que parece un hombre.
Las mujeres, extasiadas, le llaman “Seraphitus”.
Y es tan bello "Seraphitus" que parece hembra.
Así que los hombres, extasiados, le llaman “Seraphita”.
Seraphita, Seraphitus... Tan bell@ que parece noruega.
Como todos saben, las noruegas no son humanas.
Mitad humano, mitad ángel. Como Anita Ekberg (que era sueca, pero no importa).
Y es que a escandinavia vamos los humanos en tránsito de las esferas superiores.
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Seraphitus. Capítulo 1
Empieza la historia en las cumbres heladas del monte Falberg. Seraphita y Minna han escalado hasta allí. Minna declara su amor a Seraphitus, y Seraphitus la evade, argumenta que no es humano, que el amor es imposible entre un humano y un ser superior. Minna le dice poséeme, humíllame, golpéame. Seraphitus le dice sufre, pues la virtud de la mujer se logra con el sufrimiento.
Minna llora, porque a una mujer siempre le afecta ver glorificada su debilidad.
Seraphitus da la espalda, la lleva de vuelta y se vuelve al castillo.
David, el anciano sirviente mira a Seraphita dormir desnuda y dice qué bella y cuánto ha de sufrir mi niña.
Y se masturba.

Seraphita. Capítulo 2
Wilfrido va a ver a Seraphita al castillo y le declara su amor. Seraphita lo evade, le dice que hay designios más altos para un hombre que su talento y Wilfrido se va humillado a la capilla del pastor Becker. Y se masturba.

Seraphita- seraphitus. Capítulo 3
Wilfrido increpa al pastor Becker, dispuesto a averiguar quién es Seraphita. Éste le cuenta la historia de Emanuel Swedemborg y sus 18 volúmenes angélicos. (1688-1749).
Emanuel. Sueco. Físico, matemático y astrónomo que abandonó todo para escribir una teoría sobre los Angeles es expropiado por Balzac que se da garra en citar los libros de Swedemborg.
El capítulo acaba en una acalorada discusión entre Minna y Wilfredo sobre la identidad sexual de Seraphita.
Los tres se masturban.

Las nubes del santuario. Capitulo 4
Becker, Wilfrido y Minna no se han puesto de acuerdo sobre el sexo de Seraphita, pese a la masturbación, así que se van a palacio a aclarar las brumas de sus poluciones. Seraphita los enfrenta, los trata como lo que son: seres imperfectos viviendo en un mundo inferior. A continuación sermonea sobre otras costumbres no superadas por la humanidad, la muerte y la vulgaridad de follar; amor, le llaman. Luego cuenta de las luchas angélicas y reivindica a los demonios como ángeles.
Ella es un ángel.
Todos se masturban.

Los adioses. Capítulo 5
Dialogo entre Wilfrido y Minna. Wilfrido da a conocer su identidad como conquistador de Europa, Minna como costurera.
Ambos temen perder a Seraphita cuando suba al cielo, pero se ponen de acuerdo en que no le fallarán: el futuro de la humanidad provendrá del semen de un político y de los óvulos de una costurera.

El camino para ir al cielo. Capítulo 6.
Wilfrido y Minna, enamorados, camino al Falberg para engendrar la humanidad, encuentran a Seraphita.
Ella les dice que único camino para ir al cielo es la oración.
Entonces oran.
Y se masturban.

La asunción. Capítulo 7.
Los cielos se abren y Seraphita (que ha renunciado a todo placer y deseo) se eleva a la categoría de arcángel Ad astra per aspera (a las estrellas sin dificultades).
¡Masturbaos!
Ave dea, homini dixi.

De modo que todo el libro gira en torno a la renuncia de los apetitos y de las pasiones y a los desvaríos cosmológicos de un opiómano sueco. ¿Qué teorías son esas de Swedemborg que tanto atraían a Borges y a Balzac?
Más o menos la que sigue:

“después de la muerte se abre el primer cielo a esta doble naturaleza humana (hombre mujer) purificada. Mueren así los hombres en la desesperanza, mientras el espíritu muere extasiado. De modo que el natural, estado en el que están los seres no regenerados; el espiritual, estado en que están los espíritus angélicos (Seraphita); y el divino, estado en el que mora el ángel antes de romper su envoltura; son los tres grados de existir mediante los que el hombre llega al cielo”

¿Recuerdan Las bodas entre el cielo y el infierno de Blake?
Yo sí.
¿Es una crítica o una sátira lo que hace Blake con Swedemborg?
Donde Swedemborg pone Angel, Blake pone Demonio.
Si Swedemborg dice que vio el planeta Marte y que todos allí eran bajitos y cabezones y que odiaban la honestidad, Blake salta a júpiter y engaña al Angel que lo guía con una imagen terrenal de simios que se violan y se devoran en siete casas de ladrillo.
Donde Swedemborg ve siete ángeles en siete casas de oro, Blake ve siete demonios en siete casa de ladrillos, y pobreza.
Luego de parodiar sus profecías, dice del sabio:
“Swedemborg no ha escrito una sola verdad. Ha escrito solo las viejas falsedades. (Usa) la conversación con ángeles que son todos religiosos, y no con demonios que detestan todos la religión porque era incapaz de hacerlo a causa de sus fatuas nociones. De modo que los escritos de Swedemborg son una recapitulación de todas las opiniones superficiales y un análisis de las que son más sublimes, pero nada más. Cualquier hombre dotado de talento mecánico puede, partiendo de los escritos de Paracelso o de Jacob Brehmen, producir diez mil volúmenes de valor igual a los de Swedemborg; y de las obras de Dante y Shakespeare puede producir un número infinito. Pero cuando lo haya hecho que no pretenda saber más que su maestro, pues solo sostiene una vela al sol.”
¿Crítica o Sátira?
Las dos cosas.
Borges sucumbió al hechizo de Swedemborg.
Balzac sucumbió al hechizo de Swedemborg.
Blake sucumbió al hechizo de Swedemborg.
Bhor no sucumbió al hechizo de Swedemborg.

Conclusión:
Panteísmo, religión de mentecatos.